Tuesday, February 8, 2011

Terrorismo por Amor

Vi en mi clase de español un cortometraje que se llama “7:35 de la mañana” por Nacho Vigalondo. En mi opinión es un poco extraño. Hay una mujer que entra en un bar para comprar su café y cuando se sienta, un hombre que canta aparece con musicantes. El hombre canta a la mujer creo para demonstrar  su amor por ejemplo cuando dice que “la chica es mona”. Me di cuenta de que todas las personas en el café la ignoran. Personas no hablan con ella ni la miran. Es como las personas son  paralizados y están bajo control del cantante cuando leen liricas en un papel y bailan. Es solo cuando uno no puede leer el papel que descubrió que el cantante es un terrorista. En fin, la canción termine, y el hombre se suicida. En mi opinión, si comprendo la película, como muestra su amor es en una manera especial y loca. La gente simplemente dice ‘te quiero’. De cualquier manera, la película es inolvidable debido a la canción y es sensacional a ver en formas que no esperan. 

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No puedo parar a pensar en ella. Su risa, su sonrisa, sus besos, su tacto. Ella es la chica perfecta, pero todavía no puedo tenerla. Ella es demasiado buena que mí, y comprometida con otro que no ama. Él era rico y ella necesitaba el dinero. Nunca estará conmigo pero la quiero. Su presencia está siempre en mi vida. La veo en mis sueños, huelo su perfume en cada lugar que encuentro. Es imposible olvidarla.

Su nombre es Adriana. La conocí de una cafetería que se sitúa en el centro de Madrid. Ella estaba sentada sola, leyendo un periódico, tratando de esconder su cara. Ella lloró en secreto. Su máscara se cayó gota a gota por el lado de su cara, las gotas de negro deslizándose por sus mejillas rojas. Yo no podía dejar de mirarla. Su belleza era imposible de ignorar y verla con lágrimas hizo sentir como si el mundo se caía a pedazos. ¿Cómo es posible que alguien tan bella pueda sentirse triste?

Me fui a su lado con ninguna intención. Mis pies solo caminaron paso a paso, sin pensar. Ella me miró y sus ojos mojados me miraron abajo. Pensé en lo que me iba a decir. “Eres hermosa” fue mis primeras palabras hacia ella. Ella me miró en mis ojos y sonrió. Me senté y empezamos a hablar naturalmente, a pesar de que éramos desconocidos. 

Poco a poco, empezamos a conocernos y comenzamos a verse con frecuencia. Siempre me levantaba temprano para ser con ella al café a las siete treinta y cinco de la mañana. Y pronto, nuestra amistad se transforma en amor. 

Durante los últimos seis meses fueron enmarados. Caminamos la cuidad juntos, vimos películas en la oscuridad, cenamos en restaurantes, y sentamos en hierba bajo del sol brillante del verano. Era el mejor momento de mi vida. Pero, un día, me dijo que estaba comprometida con otro hombre y que no podía verme otra vez.

Ese fue el fin de nuestra relación y de mi vida. Una mañana volví a confesar mi amor en el mismo restaurante que nos encontramos a las siete treinta y cinco de la mañana. Ella todavía estaba allí, leyendo el periódico. Me presenté y canté una canción a ella con la gente del café. Esta vez sin embargo, me miró asustada y disgustada. Sabía que no me llevaría de vuelta y me maté, y ella, la dejé con una ducha de confeti.


Fuente: http://www.youtube.com/watch?v=ziqvcJsKUoE

- Cesar

1 comment:

  1. ¡Guau César!
    ¡Esta sí que es una entrada de blog!
    ¡Creativa, poética, y muy romántica!
    ¡Excelente trabajo!

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